A través de una revisión teórica y análisis de experiencias internacionales en Uruguay, México y España, grupos focales y una encuesta que recogió la opinión de 147 directivos de diversas regiones del país, se buscó comprender de manera integral cómo los equipos directivos están enfrentando los desafíos de la transformación digital y sus necesidades formativas en inteligencia artificial (IA).
La inteligencia artificial (IA) poco a poco ha ganado terreno en los establecimientos educativos del país. Actualmente, las y los directivos utilizan de manera incipiente herramientas como Chat GPT para redactar circulares, organizar horarios, preparar discursos o generar pautas de observación, pero no de manera homogénea. Es por eso que, en educarchile, nos propusimos indagar al respecto e identificar las percepciones, experiencias y necesidades formativas de las y los líderes escolares respecto al uso de la IA en sus funciones directivas y pedagógicas, en un proceso exploratorio que culminó con el informe “Potenciando la gestión escolar con Inteligencia Artificial”.
Por medio de una revisión teórica y análisis de experiencias internacionales en Uruguay, México y España, grupos focales y una encuesta que recogió la opinión de 147 directivos de diversas regiones del país, buscamos comprender de manera integral cómo los equipos directivos están enfrentando los desafíos de la transformación digital. Asimismo, distinguir qué competencias requieren para integrar de manera estratégica y ética estas tecnologías emergentes en sus establecimientos para fortalecer la gestión educativa y la mejora de los aprendizajes.
El marco teórico del informe da cuenta que, en la gestión directiva, la IA se visualiza como aliada para optimizar decisiones basadas en datos, reducir la carga administrativa y apoyar la planificación estratégica. En el artículo publicado en 2024, “Inteligencia artificial y liderazgo escolar: retos, oportunidades e implicaciones. Liderazgo y Gestión Escolar” de Michael Fullan, Cecilia Azorín, Alma Harris y Michelle Jones, se señala que, a través de la automatización de tareas rutinarias y mecánicas, los administradores educativos podrían liberar tiempo para centrarse en aquellas tareas que demanden sus habilidades humanas e inteligencia social.
Respecto al liderazgo, se enfatiza la necesidad de un nuevo perfil de directivo: con competencias digitales, visión crítica, capacidad ética y un enfoque centrado en las personas. Se reconoce que la IA no reemplaza el juicio humano, pero puede amplificar las capacidades del liderazgo escolar, especialmente si se usa para liberar tiempo y tomar decisiones más informadas. De este modo, el desafío es desarrollar habilidades para conducir esta transformación de forma responsable, transparente y pedagógicamente significativa.
"Integrar la inteligencia artificial en la gestión escolar requiere un liderazgo con visión pedagógica y pensamiento crítico. Si bien la IA no sustituye el juicio humano, puede convertirse en una aliada estratégica para optimizar procesos, reducir la carga administrativa y respaldar decisiones basadas en evidencia. Para ello, es fundamental que los equipos directivos se familiaricen con las capacidades, oportunidades y limitaciones de estas herramientas tecnológicas, de modo que puedan incorporarlas con sentido educativo y de forma contextualizada", puntualiza Martín Cáceres, director del Centro de Innovación del Ministerio de Educación.
Grupos focales
En tanto, en los grupos focales conversamos con 13 líderes educativos de diversas regiones del país, proceso en el que las y los participantes indicaron que emplean la IA generativa principalmente a nivel individual, con foco en apoyo administrativo y pedagógico.
La IA aparece como una oportunidad para liberar tiempo de tareas operativas y enfocarse en la mejora pedagógica y el bienestar institucional. Pero ¿cuáles son esas tareas operativas que les demanda tiempo? Entre las más mencionadas, están la redacción de documentos informativos (circulares, comunicaciones, correos electrónicos), la elaboración del calendario académico, la revisión de protocolos institucionales, redacción de informes para el sostenedor (DAEM o SLEP), creación y consulta de fichas por estudiante, agendamiento de entrevistas con apoderados, distribución de cargas horarias y proceso de matrícula.
Es así como en el ámbito de la gestión, reconocen el potencial de la IA para apoyar sobre todo la elaboración del Plan de Mejoramiento Educativo (PME), automatizar tareas repetitivas como las ya mencionadas, analizar información institucional y mejorar la comunicación con la comunidad. Además, identifican beneficios que puede traer la IA como la actualización profesional, la personalización del aprendizaje y la mejora de procesos internos.
Uno de los desafíos más mencionados fue la necesidad urgente de formación, así como la falta de criterios claros y lineamientos normativos que orienten el uso de la IA en contextos escolares. Coinciden en que requieren un acompañamiento formativo para liderar las transformaciones que se están viviendo en las escuelas y liceos, pero solicitan que en el proceso formativo se incluya a toda la comunidad educativa.
Los equipos directivos resaltan que aquellas capacitaciones más exitosas son aquellas que consideran a todos los estamentos del establecimiento, sobre todo a las y los docentes que son quienes tienen contacto cotidiano con las y los estudiantes, o bien, que los directivos tengan directrices, claridad y apoyo para poder incorporarlos al proceso de implementación de IA.
“Si no se avanza como comunidad educativa las capacitaciones no tienen la misma efectividad, de forma transversal, más allá de las iniciativas autodidactas y la proactividad que algunos profesores ya muestran (...) sería súper interesante que se instalara el tema en las escuelas, en las comunidades educativas, que tuviéramos una formación a nivel de funcionarios incluso, pues yo asumo mucho también a los asistentes de aula, a los asistentes de la educación, porque también tienen que estar inmersos, no puede ser ajenos lo que se está usando en el colegio o a lo que ellos mismos también les podría facilitar en algún minuto, yo creo que la formación es clave en este sentido, para poder sacarle el mayor provecho a la herramienta y que sea realmente un aporte para la comunidad” (directora de la Región Metropolitana).
Encuesta
La encuesta, que se aplicó entre el 15 y el 22 de abril de 2025, a una muestra de 147 líderes educativos, arrojó que el uso de la IA por parte de directivos radica principalmente en la elaboración de informes, análisis de datos académicos y la optimización de tiempos en tareas repetitivas.
La mayoría considera que el rol del liderazgo escolar en la implementación de IA es muy importante (80,95%) y que para que ese rol se fortalezca, se requiere de formación práctica y contextualizada en talleres prácticos sobre herramientas de IA aplicadas a la enseñanza (34,48%), estrategias para integrar IA en procesos de gestión escolar (22,07%), formación en aspectos éticos y normativos (16,55%), alfabetización digital general (13,79%) y acompañamiento personalizado para la integración de IA en las escuelas (13,10%).
Este punto, sumado a la opinión de las y los participantes de los grupos focales, releva aún más la formación en competencias para el uso de la IA en la gestión escolar. La buena noticia, es que pronto pondremos a su disposición dos nuevos cursos de autoaprendizaje sobre IA y liderazgo educativo, que serán parte de la oferta formativa de Desarrollo Profesional del segundo semestre.
"Hoy es necesaria la capacitación específica en IA para las y los directivos, que atienda las necesidades de su rol estratégico y que se haga cargo de los nuevos desafíos digitales para potenciar la gestión educativa. Desde educarchile usaremos los hallazgos de este informe para ofrecer una propuesta formativa que haga sentido a las comunidades", sostiene Marcela Colombres, directora de Aprendizaje para el Futuro de Fundación Chile.
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